El arte de usar un rizador de pestañas. ¿Quieres saber cómo sacarle el máximo partido? En primer lugar, escoge el que mejor se adapte a la forma de tus ojos, parecen todos iguales pero no lo son:
• Si tus ojos tienen forma almendrada o están ligeramente hundidos escoge un rizador de curvatura plana.
• Si tus ojos son grandes o prominentes elige un rizador con mayor curvatura.
Escoger la forma adecuada de rizador te garantiza un resultado óptimo. Toma nota de estos consejos para elevar tus pestañas y conseguir un resultado súper profesional.
Rizador de pestañas, ¡fuera miedos!
Utilízalo sin miedo pero teniendo precaución en dos aspectos: en primer lugar, es importante mantener la herramienta muy limpia y sustituir la goma cada poco tiempo. En segundo lugar, nunca rices tus pestañas con este tipo de herramienta después de haber aplicado la máscara de pestañas.
1° Asegúrate de que tus pestañas están limpias y no tienen ningún residuo cosmético.
2º Abre el rizador y posiciónalo para rizar la base de las pestañas sobre la almohadilla, cierra la herramienta primero con precaución y no presiones hasta no estar segura de que no pellizcas piel del párpado.
3º Riza durante unos 10 segundos más o menos y sin hacer movimientos que puedan generar tensión.
4º Abre el rizador con suavidad y repite la acción si la longitud de tu pestaña lo permite en la parte media más próxima a las puntas (esto por lo general no suele ser necesario).
5º Una vez rizada, aplica tu máscara de pestañas.
¡Ojo! Si tu pestaña está muy debilitada, recomiendo utilizar un rizador térmico para evitar la fricción sobre la misma y su posterior caída. El mayor beneficio de estos rizadores térmicos es que lo podemos usar después de la máscara de pestañas y así conseguir un resultado espectacular.